3 de noviembre de 2011

Principio-s

Principio, del latín principĭum, "Primer instante del ser de algo", "Base, origen, razón fundamental sobre la cual se procede discurriendo en cualquier materia", "Norma o idea fundamental que rige el pensamiento o la conducta". (RAE)

Comenzar por el principio, tener mis principios, ser el principio. A menudo, con excesiva frecuencia, la sociedad que nos ahoga nos envía hacia el abismo más oscuro y tenebroso que existe en el ser, el olvido. Olvidar genera una serie de conflictos que pueden desembocar si no se detienen a tiempo en la demolición de la persona. La supresión de los principios es una marca tan representativa que hace que la gran mayoría ya ni siquiera piense en ellos. Será que el simple hecho de pertenecer a un siglo olvidado, de tener que ser testigo de una transición contada y ser partícipe de una revolución que ha cambiado el mundo, me hace ser más escrupuloso con los datos del pasado. Será que no quiero extirpar de mi cabeza aquello que me ha llevado a ser lo que soy, a conseguir lo que poseo y a actuar como creo conveniente. Como hablamos de principios y no entre principiantes intentaré ser escueto y nítido.
En apenas dos semanas debemos pronunciarnos en forma de papel doblado. Tenemos la obligación (al menos moral) de manifestar qué queremos y sobre todo cómo lo queremos. Llevo más de dos semanas escuchando frases del tipo de "no votaré", "no sirve para nada", "son todos iguales", y pregunto ¿acaso has mirado si hay algo más de lo que te muestran?. La política se debe a lo público, y lo público, afortunadamente (aún), tiene que elegir al político. Como el político, por definición, debe ser cortés, admitirá que no se le vote, muy a su pesar de esperar el tan ansiado voto. La lucidez de un político (al menos español) no radica en su capacidad para discernir, sino más bien en todo lo contrario. Quizás sea por eso por lo que es más que conveniente ir a votar, por el simple gesto de hacerles un poco más sabios, de alguna manera tendremos que enseñarles que no son, ni serán, aquello que buscamos (haciendo alusión a los mayoritarios en la escena política). No se trata de patalear, ni de gruñir, y aún mucho menos de regañar. Se trata de detenerse, observar el entorno por completo y elegir entre la variedad, porque será en ella en la que radique la fertilidad de una democracia que sigue viva, que está tan viva que aún es joven, y que en consecuencia debe educarse para seguir madurando en un proceso que muchos de esos políticos creen haber terminado. Al menos por aquí, se sigue pensando que evolucionar es el resultado de sumar y restar las veces que sea necesario los factores que van apareciendo para poder lograr una mejor adaptación.
Casi hace un año que realicé e
stas fotografías, os dejo por aquí una vista de la Alhambra que me encantó, y que aún hoy me sirve para pensar un poco. Hay que ver como pasa el tiempo...

Destierros

Destierros
Esperaremos la posibilidad

En honor a un gran hombre

En honor a un gran hombre
Erase una vez un largo